Tres adultos mayores en una finca reflejan un país de trabajo y de la felicidad que regala en campo
Los encontré silenciosos, cada uno en lo suyo, y lo suyo es sacarle al campo su fruto, a sus animales el diario vivir. Así viven. Así enfrentan el día, incluidos cada domingo.
Ana Francisca, Fidel y Luis Ricardo son tres adultos mayores que encontramos en una finca incrustada en las montañas agrestes en la ruta de Los Santos hacia Quepos, bajo una bruma fría que en momentos se vuelve densa.
Muy tímidos cuando tuvieron que sentarse a contar de su vida, pero risueños, simpáticos, cuando ya se dieron cuenta que de vez en cuando se vale reírnos de la vida que llevamos. Al menos eso me lo dijeron en la entrevista que dejamos aquí:
Hay momentos en los que golpea pensar en la soledad en la que viven. Pero esa misma soledad es la que acompaña una felicidad del campesino.
Los dejamos después de compartir un café que nos ofrecieron dentro de su casa humilde, repleta de fotografías, del paso de los tiempos…
